As Corcerizas se localiza en el entorno forestal de la Sierra de San Mamede, en el sistema montañoso del Macizo Central de Ourense. Situado en el suroeste de la provincia, cuenta con 53.000 hectáreas que lo conforman como el segundo espacio protegido más extenso de Galicia, catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria (L.I.C.) dentro de la Red Natura 2000, figuras de protección a nivel europeo. Constituye un espacio de gran riqueza faunística con un total de 176 especies de vertebrados, destacando especies protegidas como el águila real y el lagarto verdinegro y especies amenazadas seriamente como la perdiz común. La variedad que encontramos en anfibios y reptiles de montaña también es importante, existiendo diferentes tipos de lagartos y salamandras, característicos de la región. Entre los mamíferos, la liebre, el lobo, la marta, el ciervo, el corzo o el jabalí son muestra de la gran biodiversidad.
Por su alto valor ecológico y rareza, resulta relevante el Bidueiral de Montederramo, declarado Zona de Especial Protección de los Valores Naturales (ZEPVN) y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC). Se distingue por ser uno de los bosques de abedules situado más al sur de Galicia, por la altitud en la que se encuentra (entre 1600 y los 959 m), y por su estado de conservación. Además destaca por el resto de especies autóctonas como acebos, serbales, arándanos, robles, helechos, líquenes y otros ejemplares que cambian sus tonalidades según el paso de las estaciones.
Otro atractivo de la sierra es el Río Arnoia, que nace en las cumbres de San Mamede desde las cuales puede observarse los restos de la huella del mar de agua dulce que un día llenó de vida y dulcificó el clima de la comarca de la Limia, la Lagoa de Antela. Es reconocida como una de las lagunas más importantes de la Península Ibérica, tanto por su extensión como por su riqueza, desecada a partir del año 1956.
La ubicación de As Corcerizas es privilegiada también por la gran riqueza etnográfica que la rodea, debido a la cercanía con varios pueblos típicos de la montaña gallega y otros elementos patrimoniales singulares. El descenso por la montaña nos lleva hasta Rebordechao, pueblo que conserva la riqueza arquitectónica de las construcciones populares tradicionales, como forjas, colmenares, molino de agua, hornos comunales o pajizas, construidos con los recursos de la zona. El Ayuntamiento de Vilar de Barrio en el que se sitúa, cuenta con diversos lugares de interés y rutas turísticas pasando por sus pueblos, así como el camino de la Vía de la Plata, una alternativa a la peregrinación a Santiago de Compostela.